WASHINGTON, 18 de octubre. /TASS/. Estados Unidos y China quieren que haya orden en el mundo, pero Pekín aboga por un orden mundial “antiliberal”, lo que explica la competencia entre ambos países, afirmó el lunes el secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken.
“En todo momento, especialmente después de la Segunda Guerra Mundial, ha quedado claro que el mundo no se organiza por sí mismo. Y la elección para Estados Unidos es la siguiente. Si no asumimos el liderazgo en esto, ocurre una de estas dos cosas: o lo hace otro, quizá China, y de nuevo, probablemente no de una manera que refleje plenamente nuestros intereses y valores, o, lo que también es malo, nadie lo hace, y entonces hay un vacío que se llena con algo malo antes de que se llene con algo bueno”, declaró este alto funcionario norteamericano en su discurso que ofreció en la Universidad Stanford (California, EE.UU.) y transmitió en directo el Departamento de Estado estadounidense en su sitio web.
El secretario de Estado subrayó que EE.UU. tiene un gran interés en desempeñar un papel de liderazgo en el proceso de la organización del mundo. “En mi opinión, China también quiere orden, pero es un orden antiliberal. El orden al que aspiramos no es ideal, pero es más liberal. Y en eso consiste la esencia de esta competencia”, explicó Blinken cuando le pidieron que comentara la apertura del XX Congreso del Partido Comunista de China, que se celebrará hasta el 22 de octubre.
El alto funcionario norteamericano añadió que últimamente las acciones de Pekín “en el extranjero se han vuelto más agresivas y, en muchos casos, representan un desafío a los intereses y valores” de Washington. “Esta relación [entre EE.UU. y China] son una de las más importantes que tenemos. Es una de las relaciones más complejas. Y en los últimos años hemos visto la aparición de aspectos realmente hostiles en esa relación”, considera Blinken.
En su opinión, “el mundo espera” que China y EE.UU. encuentren formas de cooperar para resolver los principales problemas internacionales, algo que no debe ignorarse. Se trata de cuestiones climáticas, sanidad mundial y lucha contra el narcotráfico. “Sabemos que no podemos abordar el problema del clima como deberíamos si China no forma parte del panorama. [Este país] tiene que decidir, nosotros no podemos decidir por él. Tiene que decidir si eso corresponde a sus intereses”, manifestó el secretario de Estado de EE.UU.
“Lo mismo ocurre con la sanidad mundial. Y no se trata de buscar un culpable de la pandemia. Se trata de averiguar cómo podemos construir un sistema sanitario mundial más fiable para que algo así no vuelva a suceder. China debe ser parte de la solución”, añadió Blinken.
