Ciudad de México, 28 nov (Sputnik).- México alertó sobre el “riesgo real” de una catástrofe nuclear, al presidir este lunes la segunda reunión de los Estados parte del Tratado sobre la Prohibición de las Armas Nucleares (TPAN), en la sede de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), en Nueva York.
“El riesgo de una catástrofe nuclear es real y va en aumento. La ausencia de avances tangibles en el desarme nuclear nos obliga a elevar el tono y el contenido de nuestro mensaje, no hay lugar para el silencio y la pasividad”, expresó el representante permanente de México ante la ONU, Juan Ramón de la Fuente, al presidir la sesión.
En la primera cita de Estados parte del TPAN, celebrada en junio de 2022 en la ciudad austriaca de Viena, México fue designado para presidir la siguiente reunión y evaluar el estado de implementación del tratado en una sesión que incluirá un debate temático sobre el impacto humanitario de las armas nucleares.
De la Fuente dijo que ahora se conoce mejor cuáles serían las catastróficas consecuencias humanitarias que pueden resultar de una detonación de armas nucleares.
“Dicho con toda claridad, las armas de destrucción en masa no solo no garantizan la seguridad internacional, realmente lo que hacen es poner en peligro la supervivencia de la humanidad”, subrayó el embajador mexicano en el discurso inaugural.
México rechaza las armas nucleares desde su aparición, ha sido promotor de iniciativas para eliminarlas, e impulsó la primera zona libre de armas nucleares en el mundo, vigente en América Latina y el Caribe, con el Tratado de Tlatelolco, firmado en 1967.
TENSIONES GEOPOLÍTICAS CRECIENTES
De la Fuente agradeció la presencia de los representantes de los países firmantes del TPAN como muestra del compromiso común por alcanzar y sostener un mundo libre de armas nucleares en medio de crecientes tensiones internacionales.
“Las tensiones geopolíticas crecen a la par del gasto militar y de la modernización de los arsenales nucleares”, prosigue la postura mexicana.
México sostiene que hay cerca de 13.000 armas nucleares, y que 3.800 estarían listas para ser detonadas en cualquier momento.
En consecuencia, “el riesgo del uso deliberado o accidental de las armas nucleares está hoy más presente que nunca antes”, dijo De la Fuente.
El diplomático considera que, en ese marco, es inaceptable guardar silencio ante posturas que “abogan por la conservación, la amenaza o incluso el uso de esas armas como instrumento de coerción”.
Sostuvo que la ausencia de avances tangibles en el desarme nuclear obliga a elevar el tono y el contenido del mensaje pacifista.
El embajador subrayó que “el riesgo de una catástrofe nuclear es real y va en aumento”, lo cual obliga a condenarlo con un espíritu inclusivo y multilateral.
En el evento participarán sobrevivientes de las bombas atómicas y de los ensayos nucleares.
También asisten representantes del Comité Internacional de la Cruz Roja y la Campaña Internacional para Abolir las Armas Nucleares (ICAN, por sus siglas en inglés), figuras galardonadas con el Premio Nobel de la Paz, representantes de la sociedad civil y la comunidad científica.
La segunda reunión del TPAN se desarrolla en un contexto global muy diferente al que prevalecía hace dos años, indica la postura oficial.
Un comunicado de la Cancillería -emitido antes de la reunión-, indica que la delegación mexicana ha negociado una declaración política que permita refrendar compromisos y enviar una señal esperanzadora que fortalezca la arquitectura mundial del desarme nuclear.
El TPAN es el primer acuerdo multilateral aplicable a escala mundial que prohíbe íntegramente las armas nucleares, de conformidad con el derecho internacional humanitario.
Fue abierto a firma en 2017, entró en vigor en 2021, y actualmente cuenta con 69 Estados parte, así como con otros 24 Estados que lo han suscrito, pero aún no lo han ratificado.