Por Radio Insumisa (Barrancas de Pudahuel)
Estamos ad portas de una nueva elección presidencial la cual se da en un contexto internacional de desmoronamiento económico, financiero y de las “democracias” occidentales, producto de la crisis capitalista, derivada en una profunda crisis económica que ha causado estragos en los trabajadores y la población a nivel planetario y que se ha agudizado en forma virulenta con la guerra imperialista entre la OTAN y Rusia, encabezada por EE.UU la cual se desarrolla en Ucrania, y que ha generado conflictos geopolíticos regionales por la disputa de zonas estratégicas y los mercados mundiales. Elección, que se da en un clima de apatía, atomización y despolitización de la población, con el desgobierno de Boric desgastado por el incumplimiento de sus promesas de transformaciones sociales, por la corrupción y su programa absorbido por los intereses del gran empresariado, quienes descargan la crisis sobre el pueblo, con los trabajadores agobiados por los magros salarios, la alta inflación, el alza galopante de los productos que conforman la canasta familiar, el alza de la electricidad, por la miseria y la extrema pobreza; con un Código Laboral que consagra la subcontratación y el trabajo precario.
A ello, se agrega la inmigración ilegal, la delincuencia, el narcotráfico, el crimen organizado y el sicariato con la complicidad del Estado a fin de mantener a la población presa de la inseguridad, la desolación y el miedo con el objetivo impedir que el pueblo se organice y se alce en lucha por la conquista de sus legítimas demandas económicas, sociales, democráticos y culturales.
Los empresarios y la casta política: las opciones políticas que imponen al pueblo
La casta política es una sola, la cual siempre ha estado al servicio del gran empresariado y del capital foráneo. Sin embargo, sus relaciones se traducen en cómo se disputan el poder y los recursos económicos del Estado, cual buitres y aves de rapiña. Para ocultarlo, en estas elecciones nos imponen la dicotomía de la opción entre izquierda y derecha, sobre promesas de qué candidato gobernará mejor. No obstante, esta perspectiva es utópica y falsa porque -como la experiencia histórica lo ha demostrado- ningún candidato o coalición, resolverá la crisis política, económica, social, cultural y moral imperante a causa de la decadencia de la sociedad capitalista chilena contemporánea.
Porque Kast, continuará resguardando la sacrosanta propiedad privada de los grandes empresarios, intensificará el robo de los fondos de pensiones de parte de las AFPs, (las cuales seguirá congelándolas), incentivará los despidos masivos de trabajadores, profundizando la cesantía, la miseria y la degradación del pueblo trabajador y, sobre todo, incentivará el saqueo de nuestros recursos naturales por parte de las transnacionales. Por otra parte, exacerbará su doctrina del odio contra la mujer, los inmigrantes, exaltará el racismo, la fobia, la xenofobia, la discriminación de las diversidades sexuales.
Por tanto, el voto a Kast, Mathei o a Jara -que será la encarnación de Boric- implica seguir encubriendo el parasitismo de la casta política, el robo de cuello y corbata, las lacras sociales y las catastróficas secuelas que ha engendrado la crisis capitalista en los trabajadores y la población, mermando sus ya, deterioradas condiciones de vida, pues a lo sumo tirarán algunas dádivas asistencialistas al pueblo Y, sobre todo, seguirán defendiendo los privilegios de los ricachones de nuestro país. Es por ello que no apoyamos a estos candidatos, porque ninguno representa los intereses del pueblo. De ahí que optamos por el VOTO NULO, poniendo en la papeleta nuestras demandas (salud, educación, vivienda, trabajo, cultura, etc.).
Nuestra posición: utilizar esta elección como tribuna de denuncia política al sistema
Esta elección la utilizamos como tribuna de educación política, de agitación y propaganda y organización de los trabajadores y la población para denunciar las lacras sociales que engendra el capitalismo, para desenmascarar al Parlamento corrupto, cuyos diputados solo promulgan leyes a favor de las clases dominantes, pues éste jamás promoverá leyes para resolver las calamidades que padece el pueblo trabajador; para denunciar que la atomización y despolitización ha sido el caldo de cultivo para engañarlo mil veces con falsas promesas que no cumplirán, para desenmascarar a los partidos al servicio de los ricachones, todos sumidos en el fango de la corrupción y en la absoluta bancarrota ideológica, pues mantienen a la población alineada, enajenada y embrutecida por la explotación; para desenmascarar que la Concertación-Nueva-Mayoría, el Frente Amplio y los partidos de izquierda (PC, PS, ,etc.) allanaron el camino para que afloraran las ideas de la ultraderecha y la doctrina del odio.
A levantar un programa nacional que reivindique las demandas del pueblo trabajador
Para aspirar a que la población pueda vivir con dignidad y, a la vez, sacar al país del subdesarrollo, urge levantar un Programa que reivindique las demandas históricas del pueblo trabajador y avanzar hacia un GOBIERNO verdaderamente democrático y popular a partir de la independencia política, donde los trabajadores, mujeres estudiantes, pobladores, intelectuales y organizaciones populares realmente tengan voz y voto y poder de decisión. Algunos ejes centrales:
1) La nacionalización de nuestros recursos naturales (mineros, pesqueros, forestales, etc.) bajo el control democrático de las organizaciones sociales, populares y los trabajadores;
2) Implementación de un Proyecto de Desarrollo Nacional, bajo un vasto Plan de Obras Públicas destinado a la creación de empresas, la construcción de hospitales, escuelas, carreteras, puertos, vías férreas a fin de dar dinamismo a la economía nacional;
3) salario equivalente al de un trabajador calificado para quien ejerza un cargo público;
4)) por un nuevo Código del Trabajo que garantice en pleno los derechos económicos y sociales de los trabajadores;
5) por una Asamblea Constituyente libre, soberana y popular que asegure al pueblo a ejercer su hegemonía política (mayoría) con una nueva Constitución, pues la actual (de Pinochet Lagos), es antidemocrática y reaccionaria. Y, en nuestra comuna, UNIR a trabajadores, pobladores, estudiantes, organizaciones sociales y populares para impulsar un Programa comunal a fin alcanzar el Poder Local y hacer del Municipio una alcaldía donde sea la población la que democráticamente, mande y decida sobre su propio destino y así desterrar el cohecho, el abuso de poder y la corrupción.
¡A IMPULSAR UN PROGRAMA QUE REIVINDIQUE LAS DEMANDAS DEL PUEBLO!
¡A LEVANTAR UN PROGRAMA COMUNAL PARA ALCANZAR EL PODER LOCAL!
¡CONVOQUEMOS UNA GRAN CAMPAÑA POR EL VOTO NULO!
RADIO INSUMISA DE LAS BARRANCAS DE PUDAHUEL